Qué tan seguro es el bótox?

El tratamiento con bótox se caracteriza por ser una alternativa sumamente segura dentro de la medicina estética. Por supuesto, y al igual que en cualquier otro procedimiento, existen algunos riesgos que el paciente deberá tener en consideración.

Qué tan seguro es el bótox?

El tratamiento con bótox se caracteriza por ser una alternativa sumamente segura dentro de la medicina estética. Por supuesto, y al igual que en cualquier otro procedimiento, existen algunos riesgos que el paciente deberá tener en consideración. La mayoría de los dermatólogos concuerda en que el bótox es seguro y confiable. Se realizan millones de intervenciones al año, casi sin reportes de efectos secundarios graves.

El Botox no da alergia, no produce enfermedades, ni efectos indeseables si es aplicado por profesionales idóneos. Es importante que la aplicación sea absolutamente estéril. La toxina botulínica, o bótox, se ha convertido en una de las grandes estrellas de los tratamientos estéticos. El motivo está en que al inyectarse en la piel relaja los músculos de la zona y los paraliza atenuando, así, las arrugas.

Una alternativa para evitar tener que entrar en quirófano y someterse a una cirugía estética. Sin embargo ¿por qué han empezado a saltar las alarmas?. Como dermatólogo certificado por la junta que administra con frecuencia tratamientos de botox, a menudo me preguntan cómo funciona, qué logra, cómo evitar el “botox malo y si una persona puede llegar a usar demasiado. Por esta razón, y porque sabemos que te haces muchas preguntas sobre el la toxina botulí­nica de tipo A hemos considerado importante hablar sobre las 10 advertencias básicas antes de someterte a un tratamiento con botox.

Aunque el término bótox se haya generalizado tanto para su uso terapéutico como estético, la cantidad de toxina botulínica que se inyecta en cada caso es muy diferente. Si bien la mayoría de los dermatólogos coinciden en que este método funciona, a algunos les preocupa que los pacientes se sometan a intervenciones desde una edad muy temprana, y otros advierten sobre el costo económico a largo plazo de las inyecciones recurrentes. Las arrugas en la parte inferior de la cara causadas por la gravedad y el daño solar no responden tan bien al botox. No se ha determinado la seguridad del botox para mujeres embarazadas o en período de lactancia, por lo que ningún grupo debe usarlo.

Definitivamente, el Botox es seguro y llegó para quedarse como uno de los tratamientos más efectivos para tratar las arrugas del rostro. La inyección de toxina botulínica tipo A (un tratamiento como el bótox) reduce las arrugas del entrecejo, y su uso es relativamente seguro.